Una fórmula de motivación para alejar a los chicos del mal camino. Así describió el exgobernador de Guayas Rolando Panchana a las charlas conducidas por el pianista argentino Raúl Di Blasio. Era su proyecto estrella dentro de la campaña ‘Revolución Preventiva’ que impulsaba el gobierno para frenar el consumo de drogas en los colegios de la provincia. Pero ha pasado un año y ningún resultado se ha hecho público. Lo que sí se sabe, por un informe de Contraloría, es que la contratación de la empresa ejecutora de las charlas HDC Producciones por un monto de $1.6 millones más IVA, está plagada de irregularidades.
LaHistoria.ec acudió a una de las charlas del pianista, que se realizó en el colegio Eloy Alfaro de Durán, y en la que poco se habló de la prevención del consumo de drogas, eje principal de esa serie de encuentros impulsados por la administración de Panchana.
La Contraloría evidencia que la Gobernación se acogió a un régimen de contratación especial «sin contar con estudios previos que justifiquen la existencia de una circunstancia material y/o necesidad concreta»; que no se haya coordinado la campaña con el Consep, ente encargado de dirigir las políticas antidrogas; que HDC Producciones haya aumentado su capital de $800 a $100.000 cinco días antes de suscribirse el contrato, y que Panchana haya procedido a validar el acuerdo a pesar de haber sido informado. Aunque lo más turbio tiene que ver con la justificación de los desembolsos. La Gobernación le pagó a la empresa un total de $1’200.875 sin que haya presentado respaldo de los gastos. Posteriormente y por pedido de la Contraloría, HDC entregó comprobantes por un monto de $1’192.912, del cual justificó $873.229 y dejó un saldo por justificar de $327.645,89. Es decir que la empresa presentó facturas que no tenían ninguna relación con la realización de los eventos. Según apunta la Contraloría, esto se originó «por la falta de control y supervisión por parte del Administrador del Contrato nombrado por el gobernador del Guayas, quien no solicitó el detalle al contratista de los servicios ofertados e incumplió con la cláusula Décimo Segunda del contrato… afectando la disponibilidad de los recursos del Estado».
En su momento, el presidente Correa defendió la contratación del Piano de América, como se conoce a Raúl Di Blasio. «Hay noticias distorsionadas, que el contrato costó $1.6 millones por solo 60 charlas, entonces era como a 30 mil dólares por charla, eso es impresionante. Primero, son más charlas; segundo, creo que es menos el contrato; y tercero, no es que son charlas, se lleva mil estudiantes a un auditorio…”, dijo Correa. «La próxima vez hay que negociar un poquito más fuerte, pero ha tenido un gran impacto eso”, añadió el Presidente sin tampoco presentar cifras concretas. La realidad es que los honorarios nada despreciables para Di Blasio se fijaron en $600.000, $10.000 por cada una de las 60 charlas que tenía previstas entre noviembre de 2014 y febrero de 2015, más pago de hotel y alimentación, seguridad, movilización en un auto blindado y servicio de catering durante los eventos.
¿Cuántas charlas dio Di Blasio?
Aunque la Gobernación de Guayas pagó $600.000 por los servicios de Di Blasio, el informe de Contraloría no esclarece si finalmente se presentó las 60 veces, dado que el pianista se ausentó en el mes de diciembre de 2014, como lo confirmó la misma empresa HDC Producciones en uno de sus escritos a la Contraloría. Además, los valores dispuestos para el hospedaje, alimentación, seguridad y carro blindado durante los cuatro meses que Di Blasio debía permanecer en Ecuador, fueron inferiores a los que estaban presupuestados, lo mismo pasó con el monto destinado al montaje de las charlas y a los refrigerios.
HDC presupuestó $27.000 para el hospedaje y alimentación de Di Blasio durante cuatro meses, es decir, $6.750 mensuales, pero al final del contrato cobró $16.875 por ese rubro, de los cuales, solo pudo justificar $11.700. Así mismo, tenía estimado gastar $12.000 por la seguridad del pianista y otros $12.000 por su movilización en un auto blindado, pero al final solo cobró $7.500 por cada rubro. Con la novedad que presentó facturas por 17.444 para justificar el gasto incurrido en el carro blindado y que la Contraloría estimó que solo $1.344 estaban relacionados con ese objetivo.
Por el montaje de los escenarios, la empresa cobró menos de la mitad de lo que había presupuestado. El presupuesto original era de $11.250 por cada una de las 60 charlas, lo que daba un total de $675.000. Pero la empresa cobró $315.000, lo que habría alcanzado para cubrir solamente 28 charlas si se partía del cálculo inicial. Además, de esos $315.000, HDC producciones solo pudo justificar $179.222 en gastos inherentes al contrato, dejando pendiente la presentación de respaldos por $135.777.
Algo parecido ocurrió con los refrigerios para los eventos. Para ese rubro estaba presupuestado $60.000, es decir, $1 por refrigerio para cada uno de los 60.000 adolescentes que debían acudir a las charlas en grupos de 1.000, pero a la final la empresa cobró $40.000 por ese concepto. De esos $40.000, solo pudo justificar el desembolso de $19.464, dejando un monto de $20.535 por documentar.
$18.040 por movilizar el piano
HDC Producciones sí cobró los $19.560 presupuestados inicialmente por concepto de catering y los $90 000 correspondientes al alquiler de 25 buses que trasladen a un total de 1000 estudiantes durante cada uno de las 60 charlas previstas. Aunque al igual que en los otros casos mencionados, tampoco pudo justificar la totalidad de sus desembolsos.
La empresa contratada por la administración de Rolando Panchana también percibió $18.040 para el transporte del piano a doce charlas planificadas en otros cantones de la provincia del Guayas, lo que daba un valor de $1.503 por cada movilización. Pese a esto, HDC solo pudo justificar el pago de $1.734 por ese rubro, dejando un faltante de $16.306 por justificar. Lo mismo pasó con los $36.000 cobrados por la empresa para la coordinación y logística de los eventos en otros cantones, solo pudo justificar $5.009 y quedó pendiente la entrega de comprobantes por $30.991.
Contraloría no estable sanciones
De lo que detalla el informe, los distintos funcionarios del la Gobernación de Guayas que intervinieron en la contratación deslindaron responsabilidades y argumentaron que cumplían órdenes. Rolando Panchana, por su parte, aseguró que el proyecto no fue improvisado, que «tuvo resultados sin precedentes» y que previamente se realizaron reuniones de planificación que contaron con personal del Consep. «El mensaje que se transmite tanto a los docentes, educandos y a los micro traficantes es que vea (sic) que todo el organismo social está involucrado en el combate contra el narcotráfico», suscribió. Mientras que la cuestionada empresa HDC negó que existieran «rubros o valores no justificados, al contrario, la reliquidación del contrato por parte de la institución contratante ocasionó a mi representada un desequilibrio económico”, aseguró en uno de sus alegatos.
Pese a todas las irregularidades expuestas por la propia Contraloría, el ente no estableció ningún tipo de glosa y se limitó a recomendar al gobernador y a los jefes departamentales que se ciñan a los procesos de contratación.