Yo llevo, tú llevas, él lleva, vosotros lleváis, ellos llevan. Todos llevamos. En un video ecuatoriano de primera calidad HD se observa una rutina ecuatoriana de última ralea: el lleve. Lleve.- Dícese de la acción de llevar para sus bolsillos dinero mal habido, mal conseguido, mal ganado. Dícese de un acuerdo de repartición entre privados, normalmente con dinero que proviene del sector público. Dícese de una mala costumbre, implantada desde los primeros niveles del poder y copiada hasta por los últimos escalones en el pueblo llano. De esta palabra se pueden sacar muchos conceptos, con más o menos sutilezas, pero con el mismo fondo.
El conductor de un carro maneja borracho y es detenido por un agente de tránsito. No hay problema y el infractor lo sabe. Dice la palabra mágica que lo resuelve todo: «Arreglemos. Ya sabe. Lleve«. Y el agente lleva.
Los autores intencionales de esta canción son Los Corrientes, la banda guayaquileña que impone sin pausas y con prisa la cumbia guayaca. Sí, guayaca. Así como Cali tiene el Oiga Mire Vea, Guayaquil responde con su Salsa para partirte las tapas. Pero esa canción es otra historia, para contarla después.
En el video del Lleve el protagonista es un político o un funcionario, rodeado de su séquito ansioso y hambriento de más poder. Un político que es nacido, producto y resultado de una sociedad que lo ha engendrado con paciencia y lo ha dejado en su punto: listo para robar.
Mire, yo le voy a ser sincero
apague el celular y escúcheme primero
soy un reputado funcionario de carrera
yo voy en quinta cuando el resto va en tercera
en resumen, si no hay billo no se puede
vuelva cuando tenga el presupuesto.
Hola soy el Lleve, el que está detrás de la campaña de la tele.
Betoman (Kléber Malavé), Doña Pepa (Alejandra Cervantes) y Geraré (Gerardo Alvarado), tres de Los Corrientes, lo dicen con sus palabras.
Pregunta: ¿Por qué justo lanzaron el video de El Lleve el último día que se podía hacer campaña en las pasadas elecciones de marzo?
Betoman: Estratégicamente era una bomba para esa fecha. Había que despertar la conciencia y nos valimos que venían las elecciones seccionales, pero la canción abarca mucho más que eso. No es solo sobre la política.
Geraré: Sí, va más allá de los candidatos políticos. Es sobre un patrón común porque El Lleve está en todos lados. Lo evidenciamos ahora, en un momento electoral, sí, porque era el momento oportuno debido a que estaba en la cabeza de todo el mundo, pero lo importante es que no se quede ahí, porque somos nosotros los que mantenemos ese cáncer que tanto criticamos.
Pregunta: Viendo el video de El Lleve no dan muchas ganas de votar. O dan ganas de votar nulo.
Pepa: Pues sí y no. Ya es criterio de cada uno. Es muy difícil confiar en las personas que se nos presenta en las papeletas y pensar que ellos nos resolverán las cosas solos. Eso es muy complicado. Por eso toca que trabajemos internamente todos nosotros porque la corrupción es en todo nivel.
Betoman: Tenemos estos reclamos y le ponemos música. Eso es lo que hacemos. ¿Qué si van a molestar a alguien? Nosotros queremos que les moleste a todos. A los políticos y a los que no son políticos. Porque si les molesta, ya puede ser el inicio de una reflexión sobre algo que no está sucediendo bien. Y luego viene el cambio. Queremos que las nuevas generaciones comiencen ese cambio, porque la nuestra ya está jodida. Que esas nuevas generaciones nos devuelvan esos valores. Los núcleos deben nacer sanos para que toda la sociedad sea sana. Eso queremos inculcarle a la gente. Mejoremos nuestra sociedad y la política será una consecuencia mejor de esa sociedad.
Pregunta: Al final del video, se observa una especie de revolución. La gente cansada de tanto Lleve, protesta en grupo, sale a las calles, parece que quiere linchar a los ladrones de cuello blanco. ¿No es una invitación a eso?
Betoman: Es una invitación a que se identifiquen. Que así como somos parte del problema, podemos ser parte de la solución. No queremos enfrentar a ningún bando, queremos enfrentarnos internamente, con nosotros mismos.
Pepa: En el video parece una bronca, porque el análisis interno nunca es fácil.
Geraré: Hay que confrontar el problema, lo que no implica violencia. Pero el primer paso es duro, es salir del estado de negación, hacer como que no pasa nada, cuando está pasando de todo. El problema es transversal, ocurre por todos lados.
Pregunta: ¿Y no han tenido la tentación, en algún momento, de considerarse parte de la solución y lanzarse a la política electoral? ¿Ser candidatos?
Beto: Nosotros ya hacemos nuestra parte. Hacemos país desde nuestra orilla, que es el arte, que es hacer música. Les decimos a Ecuador, hey, aquí hay música. Y la gente que sabe de política, que haga política. Pero que la haga bien.
Pepa: Nosotros hemos decidido que nuestro aporte será desde lo musical. El entretenimiento puede venir con un tipo de enseñanza, con un aprendizaje. Nosotros intentamos poner en una canción lo que nos pasa, lo que vemos, para que si alguien no lo había identificado así, lo entienda. Eso hacemos.
Las coplas costumbristas no están ausentes de las creaciones de Los Corrientes. Así nació Por accidente, una de sus canciones más pedidas en sus conciertos. Una canción que, en definitiva, habla de la teoría del caos. Muchas cosas ocurren por accidente. O casi todas. Quien sabe.
Pregunta: Esta entrevista también ha estado regida un poco por el caos. Por eso ahora viene la pregunta que debió haberse hecho al inicio: ¿Cómo y cuándo nacen Los Corrientes?
Betoman: Los Corrientes nacimos el 30 de diciembre de 2010, casi para quemar el Año Viejo. Pero ese día nacimos al público con nuestro primer show.
Pregunta: ¿Por qué Corrientes?
Geraré: Porque somos personas comunes y corrientes. En esos momentos todos teníamos nuestros trabajos, típicos trabajos de oficina, típicas cuentas por pagar…todo lo normal. Eso por un lado. Y por el otro, porque lo que íbamos a contar era lo común, lo que veíamos por todas partes. Historias de la mayoría de la gente, con las que todos se podían identificar. ¿Qué música escuchaba? Molotov, Café Tacuba, eso por mi lado, porque aquí las referencias musicales son diversas.
Pepa: Por mi lado, escucho pop. Y me han comparado con Julieta Venegas y la verdad no sé por qué, más allá del acordeón. La verdad, a mí me gustaba la primera Julieta, esa me llamó mucho la atención. Pero, bueno, cada artista busca su camino. Yo estudié en el Conservatorio, pero su sistema es muy rígido, me boté porque no lo aguanté. Aprendí piano, lo tocaba en mi casa, el clásico. Y entré a Los Corrientes tocando la melódica, antes que el acordeón, con el que finalmente se dieron las cosas.
Pregunta: ¿Y aún no les alcanza, económicamente, para vivir únicamente de Los Corrientes?
Betoman: Todavía no. Y esa es la palabra clave, «todavía» no. Apuntamos a eso, por supuesto, como todo músico. Queremos vivir del arte. Pero mientras tanto, yo soy locutor en una radio. Antes de eso, he hecho de todo, desde instituciones públicas en donde no tenía ninguna motivación y solo estaba ahí por tener un ingreso. Luego comenzaron a salir más oportunidades en el arte, como en la actuación y en la radio.
Pregunta: ¿Qué falta para dar el gran salto?
Geraré: Falta un flujo continuo en el arte de la industria, que siempre alguien esté generando contenido de calidad. Porque si alguien hace eso, todos los de la industria salimos ganando. ¿Qué nos falta para eso? Mi opinión es que a los artistas todavía nos falta identidad. Hay que buscar algo propio, en vez de repetir fórmulas de afuera. Aparte de eso, faltan lugares o espacios en donde tocar música. En Guayaquil, por ejemplo, son escasos.
Beto: Nosotros solo cantamos temas nuestros, desde el inicio de la banda. Creo que eso nos marca una identidad. Y a veces sí nos quejamos de falta de apoyo, pero con la diferencia de que nos quejamos un poco pero trabajamos cinco veces más que eso. Sí, a veces tenemos frustraciones, pero no se nota.
Geraré: Tenemos el plan de que nuestra música se escuche en el exterior. El Lleve tiene esa intención. El 25 de abril ya estará disponible en Spotify y en todas las plataformas digitales. Luego de dos meses sacaremos un segundo sencillo y también le daremos mucha fuerza.
A Pepa le antecede el «Doña», pero de doña no tiene ni un pelo. Es una mujer joven, que carga 34 vueltas al calendario, pero aparenta mucho menos. Menuda, pero con menuda personalidad. El cable a tierra de la banda. Es segura, tanto cuando habla, cuando canta y cuando toca el acordeón. Y cuando toca el corazón. Sí, a lo Julieta Venegas, pero eso a Pepa ni le va bien ni le viene mal. Ahora viene su voz. Armoniosa, afinada y casi arrulladora. Pero no es utilizada para un Duerme Negrito, ni mucho menos. Está ahí para cantarle a todos Cuando me empieces a odiar, sacada de su cabeza en esas ocasiones en las que el alma quiere hablar y no encuentra más resquicios para salir que la propia banda de unos amigos. El mejor lugar de todos para decir estas cosas:
Vuelvo a encontrarme, en ansiedad
Quiero abrazarte y no llorar
Caigo en amores que duran un segundo
Pero que duelen toda la eternidad.
Quiero flecharte, sin dudar
No tengo mucho para dar
Solo contradicción por donde busques
Que ni siquiera yo puedo explicar.
Tengo miradas que parecen dulces
Y que en el fondo te pueden asesinar.
Tienes mi corazón, nunca lo dudes
En este mundo y el más allá
Quiero ser lo que tu quieres cuando no quieres nada
Quiero que un beso recuerdes cuando me empieces a odiar
Pregunta: Pepa, tú escribiste esta letra. ¿Cómo nació?
Pepa: De la vida real, obvio. Me pasó, como a todos. La vida es un cúmulo de experiencias buenas y malas. Toca aprender de todas.
Entrevista realizada por Daniela Aguilar y Marlon Puertas, en el restaurante Central 593 de Guayaquil.