Desde el 1 de septiembre de 2017, por decreto firmado por el presidente Lenin Moreno, se supone que en Ecuador rige la austeridad económica. El país está sobre endeudado (casi el 70% en relación a su PIB) y de acuerdo a esas circunstancias, el gobierno decidió reducir gastos: menos gastos en contrataciones de personal, menos gastos en viajes nacionales e internacionales, menos gastos en teléfonos celulares, menos gastos en compras de vehículos, menos gastos en alquiler de hoteles, hosterías y locales privados.
Hay dos detalles: los decretos del Ejecutivo no rigen para los gobiernos locales, como los municipios. Y el decreto No. 135 que impone la austeridad, no hace ninguna referencia a los gastos millonarios con fondos públicos destinados para fiestas. La puerta para la farra quedó abierta.
En Machala se jactan de sus fiestas, a las que quieren posicionar como las mejores del país. Fue una idea que impulsó el ex alcalde socialcristiano, hoy asambleísta de El Oro, Carlos Falquez Batallas, quien fue el primero que contrató a artistas internacionales de buen nivel para que canten al aire libre, sin costo alguno para los asistentes. En las calles de la capital de El Oro presentaron sus shows Willie Colón, Olga Tañón, Gilberto Santa Rosa, entre otros. Pero la intención de posicionar a Machala como referencia nacional en sus fiestas, fue más allá. Como para despedirse de su cargo, en 2013 Falquez contrató a Marco Antonio
Solís, que cobraba por ese tiempo USD 450.000 por show.“Me dijeron, porqué Marco Antonio Solís, que es un artista tan importante y que será difícil de conseguir. Para Machala, nada es imposible y Machala se lo merece”, dijo orgulloso el político en la misma tarima que cantó El Buki, quien no dejaba de agradecer al alcalde por haberlo contratado. El socialcristiano siempre resaltó que estos conciertos no le costaban ni un centavo al municipio de Machala, pues sus altos costos se financiaban con donaciones de empresarios privados. En las fiestas de cantonización de junio, el alcalde impuso otra tradición: contratar para el desfile o pregón a la Miss Universo del momento, un lujo que solo Machala se podía dar. Año tras año, la mujer más bella del mundo desfilaba por las calles de la capital bananera, sin que se haga público el costo que esto significaba para las arcas municipales.
Este portal ya hizo un tema, en 2015, respecto al gasto de fondos públicos en fiestas populares: https://www.lahistoria.ec/2015/01/12/ecuador-de-fiesta-en-fiesta/
El sucesor de Falquez, Carlos Falquez Aguilar, siguió con la festiva tradición. Pese a la vara alta que dejó su padre, Falquez Aguilar decidió superarla, contratando artistas aún más caros: el año pasado contrató al colombiano Maluma y este año, decidió traer al artista del momento, el portorriqueño Daddy Yankee. Según Falquez, el reguetonero cobra por el concierto USD 650.000, de los que, una vez más, empresarios privados generosos han puesto su parte: USD 350.000 han sido donados por estos anónimos personajes, la diferencia, USD 300.000, han sido puestos por fondos municipales. Empresarios dedicados a la contratación de artistas, creen que el costo por contratar a Daddy Yankee podría ser aún mayor. Y saberlo con certeza, es complicado. El contrato para este concierto del reguetonero, descrito como tal, no está subido al portal de Compras Públicas. Sí está, en cambio, el contrato por USD 300.000 para la «realización del show artístico musical Machala Turística 2018», firmado con Jimena de los Ángeles Miranda Zapata, quien fue invitada de forma directa por la Alcaldía.
¿Quiénes son los donantes privados para que Machala tenga las mejores fiestas del país? Son empresarios dedicados a su trabajo, que no quieren salir a la luz pública, dijo en rueda de prensa el alcalde Falquez. «La gratitud con gratitud se paga», fue la frase que utilizó para explicar tal grado de generosidad que no se ha visto en otras ciudades del país. ¿Son contratistas del municipio? La pregunta la respondió, algo molesto, Fernando Apolo, del gobierno local de Machala, quien lo negó. No son contratistas, son empresarios dedicados a sus actividades privadas, a sus trabajos, que han confiado en la alcaldía de Falquez, reiteró, sin dar ningún nombre.
La contratación de artistas caros para las fiestas de Machala generó, especialmente este año preelectoral, polémica y voces a favor y en contra. Concejales de minoría como Enriqueta Pulla y Washington López Machuca, criticaron el gasto y la falta de transparencia de la contratación. López Machuca, hermano de la gobernadora de El Oro, Rosa López, indicó que esos fondos debieron destinarse para necesidades básicas de la ciudad, que las hay y son bastantes, indicó. A favor, en cambio, está la asambleísta socialcristiana Patricia Henríquez de Ugarte, que ve ventajosos estos espectáculos para la ciudad, porque «atraen el turismo». Según el vocero Apolo, se calcula que a la ciudad ingresarán USD 3 millones por concepto de los visitantes que llegarán para el espectáculo. Ganarán los sectores de hoteles, servicios, restaurantes, vendedores informales. Ganarán casi todos.
Será por eso que contratar artistas de alto costo se ha convertido en una moda, especialmente en los gobiernos locales. En El Oro, quien sigue la tendencia es el alcalde de Santa Rosa, Clemente Bravo, conocido como «El Faraón», por vestirse en alguna ocasión como Ramsés y por colocar mármol egipcio en las veredas de la ciudad. Bravo contrató el año pasado para las fiestas de agosto al reguetonero Wisin y este año se nombra al boricua Chayanne como la estrella. Y todo en época de austeridad.