Ya lo dijo la legisladora de Napo por Pachakútik, Rosa Cerda, en agosto de 2021, en un arranque de franqueza durante un discurso que daba frente a sus coidearios: «Compañeros, si roban, roben bien, justifiquen bien, pero no se dejen ver las cosas«. Algunos habrán tomado nota de la recomendación, pero otros la dejaron pasar, confiados tal vez de la premisa que en Ecuador los escándalos por corrupción se olvidan rápido, tan rápido como la misma declaración de Cerda, quien pese a la inédita confesión pública, siguió actuando como legisladora y nunca perdió su condición de Honorable. Hasta hoy.
Pero a veces hay sanciones. Ocurrió, por ejemplo, con la debutante en el Parlamento y ex Vicepresidenta de la Asamblea, Bella Jiménez, de la Izquierda Democrática, quien fue destituida de su cargo en octubre de 2021 por gestión de cargos públicos y cobros indebidos. Audios revelados por La Historia fueron la prueba irrefutable de los hechos.
Actualmente se investiga a la ex Presidenta de la Asamblea, Guadalupe Llori, de Pachakútik, por el cobro de diezmos. Y el pasado jueves 20 de octubre, La Historia reveló nuevos audios, esta vez protagonizados por el asambleísta de Cañar también por Pachakútik, Joel Abad.
La confesión de Joel Abad, registrada en la grabación, es clara y directa: «Le digo esto, me vino esta idea, para no hacer aparecer como los tales aportes, interpretados como diezmos, que tiene mucha repercusión y puede costarle el puesto al asambleísta, en ese sentido que no aparezca. Que sea como un fondo voluntario de ustedes. El porcentaje pienso que no puede ser del 10%, pero sí un porcentaje que podría ser la mitad, el 5%. Pero ahí viene otra cosa: como no son aportes individuales, no puede hacerse vía banco. Tiene que haber una persona que reciba esos aportes, tenga una cuenta y de esa cuenta se vaya gastando. Que no haya los tales depósitos a nombre de tal fulano. Ni recibos, ni nada de eso, para evitar las cuestiones legales. Aporten ustedes con ideas, yo ya les doy mas o menos el panorama».
Y aunque no lo dijeron en su momento, no todos los colaboradores quedaron conformes con la imposición. Por eso uno de ellos intentó sorprender a la funcionaria que lo llamó para dejar en claro cuánto sería el monto de su aporte. En ese momento, el hombre se bajó el sueldo con la única intención de que su diezmo sea menor.
-¿Cuánto gana usted? Para de ahí descontar el 5%.
-$800. ¿Con descuento o sin descuento?
-¿Cuánto coge usted líquido?
-Sería de restar de los 800 lo que me descuentan del Seguro.
-Ya, ya, ya. Hasta luego.
Y la mujer cierra la llamada.
«800 dice que gana Doctor», le cuenta la mujer al Asambleísta. «1800 gana. Él es servidor legislativo trece», responde con seguridad el legislador Abad. «Y todavía que de los 800 hay que restar lo que le descuentan del Seguro. La viveza criolla«, añade la enfadada mujer.
Ahora Joel Abad confirmó que los audios son reales y él habla en ellos. Ratificó que toda la conversación se dio aproximadamente hace un año. Pero no ve nada malo en el hecho porque las contribuciones iban para conformar un fondo solidario. La gente les pide muchas cosas, a cada rato, y hay que tener dinero para esas necesidades, explicó.
Lo dijo a la periodista Gisella Bayona, en una entrevista para el noticiero Notimundo:
¿Qué va a pasar en la Asamblea por este caso? Por ahora, nada. Para que pase a conocimiento del Comité de Ética es necesario que un legislador denuncie el caso y además reunir el 10% de firmas de los miembros de la Asamblea. «Es decir, debe recibir el apoyo de lo por lo menos 15 asambleístas», explicó a La Historia el asambleísta Dalton Bacigalupo, miembro del Comité de Ética, que no puede actuar de oficio.
Los miembros de Pachakútik no han dicho esta boca es mía sobre el nuevo caso de diezmos de su compañero de bancada. Recién para el próximo lunes han anunciado una reunión para conocer el tema. Mientras el presidente de la Asamblea, Virgilio Saquicela, tampoco se ha pronunciado. Él estuvo ocupado el pasado viernes apoyando con su presencia en la inauguración de una central política del candidato correísta para la alcaldía de Déleg, en la provincia de Cañar. Lo demás podía esperar.