Ni la retirada de los legisladores de la oposición, que se excusaron de presenciar la posesión de los nuevos vocales del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social (CPCCS) aludiendo falta de independencia, ni una posterior intervención de la asambleísta Cynthia Viteri, que criticó los vínculos del nuevo Quinto Poder con miembros oficialistas de la Asamblea, aguaron la celebración de Edwin Jarrín, Tania Pauker, Doris Gallardo, Tito Astudillo, Luis Burbano, Yolanda González y Juan Peña, todos exfuncionarios de este gobierno que desde ayer presiden el CPCCS.
Con el acto, en el que también tomaron juramento los consejeros suplentes Sonia Vera, Aquiles Hervas, Cruz María Bustamante, Walter Fernández, Carlos Torres y Nora Encalada, se dio por concluido un proceso de selección que inició en febrero pasado, cuando el Consejo Nacional Electoral presidido por Juan Pablo Pozo abrió la convocatoria. Un concurso que suscitó críticas y denuncias en torno a su transparencia. La también suplente Solanda Goyes no acudió a la posesión.
Tras su primera reunión, los flamantes vocales eligieron a Yolanda González como presidenta del Consejo y a Edwin Jarrín como vicepresidente. Jarrín obtuvo la mejor calificación del concurso y ostentó hasta marzo pasado el cargo de Subsecretario General del Despacho Presidencial, según consta el distributivo de personal colgado en la web de la Presidencia. Además fue Secretario de Transparencia y funcionario de la Secretaría de Comunicación y el Ministerio del Interior (ver gráfico). En cuanto a González, su último trabajo fue de subsecretaria de Pueblos y Nacionalidades. La nueva presidenta del CPCCS apareció hasta el mes de mayo enrolada en la Secretaría de Gestión Política.
“Los que hemos trabajado para el Ejecutivo, hemos cumplido siempre la ley y la Constitución, esa es nuestra independencia”, dijo Edwin Jarrín tras su posesión. Mientras que Yolanda González admitió haber sido parte del partido oficialista Alianza País (AP). Eso si, se desafilió por ética, según dijo.
Como Jarrín y González, los también vocales principales del CPCCS Luis Xavier Burbano y Tania Pauker estuvieron trabajando en el gobierno hasta antes de asumir su cargo. Burbano era compañero de Yolanda González en la Secretaría de Gestión Política presidida por Viviana Bonilla. Allí fungía de Subsecretario de Pueblos y Participación. Antes, trabajó en la Gobernación de Guayas también de mano de Bonilla, quien lo nombró Intendente cuando asumió la gobernación tras la salida de Roberto Cuero. Pauker, por su parte, trabajó hasta abril como asesora de la Vicepresidencia de la República.
La consejera Doris Gallardo ocupó algunos cargos en la Presidencia, mientras que Juan Peña laboró en la misma institución como Secretario de Seguimiento e Información por un periodo de 10 meses. Su último trabajo fue como Decano de la Facultad de Jurisprudencia de la Universidad de Cuenca. Y Tito Astudillo tuvo varios cargos en el Ministerio de Inclusión Económica y Social, incluido el de asesor de Doris Soliz, la actual secretaria ejecutiva de AP.
«Impostores, acaban de posesionar a un Consejo de Participación Ciudadana, el organismo más importante según la Constitución de este país, que designa Contralor, Fiscal, Defensor del Pueblo… ay pero que casualidad, adivinen qué, el uno esposo de la asambleísta (de AP María Soledad) Buendía, la otra esposa del asambleísta (de AP Carlos) Viteri, el otro salió del MIES, el otro de la Senplades, el otro de Carondelet», le increpó la asambleísta de Madera de Guerrero Cynthia Viteri a la bancada oficialista en el marco del debate por la regulación de vídeos en pleno, moción presentada por la legisladora de Alianza País María José Carrión.
«Mi esposo Edwin Jarrín, el mejor puntuado del Consejo de participación, llegó a ese espacio por un proceso de concurso de méritos y oposición aunque a usted le duela», respondió María Soledad Buendía valiéndose del derecho a la réplica, y añadió que «si la Asamblea tuviera algo que ver» tanto ella como su esposo se hubiesen excusado. Carlos Viteri, en cambio, pasó por alto el reclamo. Un poco más tarde y con una actitud distendida, le aseguró a la reportera del programa En Corto que la designación de su esposa Tania Pauker fue «puro mérito» y que no había palanca. Con el mismo buen ánimo, Jarrín y Buendía bailaron afuera de la Asamblea. Estaban celebrando el nombramiento.